martes, 24 de noviembre de 2015

¡Esto os salva de las guerras, del cautiverio y del control!

- Mensaje nº 1106 -

Hija mía. Mi querido hijo. Por favor, siéntate y escucha lo que Yo, tu Santa Madre del Cielo, quiero decir hoy a los hijos del mundo: No habéis atendido Mi llamada, amados hijos, sin embargo no todo está perdido. Si empezáis a rezar, el Padre os concederá gracias y se detendrá lo peor del final de los tiempos.

Así que escuchad Mi llamada y seguidla, porque el que reza no se perderá, pero el que no hace nada pronto verá lo peor caer sobre sí mismo y sobre sus seres queridos.

Así que rezad, Mis amados hijos, rezad fervientemente y llenos de amor por Mi Hijo. Rezad siempre en Sus intenciones y por el acortamiento del tiempo del fin del Padre del Cielo.

Cuánto mal está aún por llegar, y vivís como si nada ocurriera. ¿Qué mal tiene que suceder todavía en tu mundo para que corras a los brazos de Jesús? ¿Qué mal tiene que suceder para que os apartéis del consumismo y de la vida fácil? ¿Qué, hijos, os pondrá en el verdadero camino de la vida que conduce a Mi Hijo, sino vosotros mismos?

¡Daos la vuelta y cambiad! La vida fácil nunca ha llevado a nadie al Reino de los Cielos, ¡pero sí la piedad, la humildad y la devoción a Mi Hijo!

Así que seguid Mi llamada , amados hijos, arrepentíos y rezad, ¡pues es a través de vuestra oración como se detendrá lo peor y os salvará de las guerras, del cautiverio y del control!

¡ Es la oración la que , si la utilizáis, os conducirá a Jesús y os hará sobrevivir dignamente al final!

¡Es la oración que aleja lo peor y trae a la tierra la gracia del Padre que está en los cielos!

¡ Es la oración que te da fuerza y devoción, y te sirve como arma en este tiempo del fin contra el mal!

Así pues, utiliza la oración y desiste de tu facilismo, porque el diablo no duerme y ya está en proceso de corromper y controlar por completo y, en última instancia, esclavizar a Europa y a otras zonas prósperas.

¡Despierta y contraataca! Tu oración es el arma para hacerlo. Amén.

Te amo. El Cielo unido reza por vosotros y para que las gracias del Padre lleguen a cada uno de vosotros. Aceptadlas, volveos y rezad. Amén.

Vuestra Madre del Cielo.

Madre de todos los hijos de Dios y Madre de la salvación. Amén.