sábado, 14 de noviembre de 2015

¡Pronto vendrá a ti como un rayo!

- Mensaje nº 1102 -

Hija mía. Por favor, di hoy a los hijos de la tierra lo importante que es prepararse.

La mayoría de la humanidad no vive con Dios. No Le conocen porque no Le buscan. Les va bien o mal, pero culpan al Señor, a Quien No Conocen, de que les vaya mal, y cuando les va bien, ¡Entonces No Le Necesitan!

Hijos, estáis viviendo lejos de la verdad, ¡y pronto os alcanzará como un rayo!

Mi Hijo está preparado, los ángeles del Señor y del Padre están preparados, vuestros amados santos y yo rezamos sin cesar, pues ha llegado el momento, y la purificación es inminente , y si no os preparáis, pereceréis en la agitada tierra que hervirá, que vomitará, que enviará maremotos y se volcará por completo, pero vosotros, amados hijos de Mi Hijo, que sois fieles y devotos a Él y que estáis preparados, ¡no tenéis Nada que temer, pues el Señor, vuestro Jesús, os elevará y vuestra alma se salvará y no se perderá!

Hijos míos. Mucho os hemos predicho sobre el final, así que ahora juntad 1 y 1.

Ved lo que está ocurriendo y no os ocultéis, pues lo terrenal ya no ofrece seguridad, ni nunca ha podido daros seguridad. Os habéis construido un mundo ilusorio, que no es real y confiáis en el dinero y otras seguridades, pero ¿y si todo se derrumba? No os habéis devanado los sesos con esto.

Así que ahora corred a Jesús y dadle vuestro Sí, entonces estaréis a salvo y seguros, y - venga lo que venga - seréis preservados en Él.

Venid, hijos Míos, venid y no os perdáis. El fin está muy cerca, y el que no se prepare no cosechará el Reino de los Cielos.

Venid, amados hijos, y dad vuestro Sí a Jesús. Un Sí es suficiente para dar el primer paso. Amén.

Oramos por vosotros, amados hijos, unidos e íntimos.

No os perdáis porque estéis cómodos , sino volveos, Cambiad(!) y entregaos completamente a Jesús, dejad que Él tome el mando en vuestra vida, dejad que Él sea el timonel. No temáis, pues Jesús es el amor más puro, y vuestra vida será verdaderamente digna.

Así que venid, hijos Míos, venid y entregaos completamente a Jesús. Consagraos a Él y dadle vuestro Sí cada día, sin reservas y llenos de amor.

Pedid Nuestra ayuda en todo lo que hagáis y necesitéis. Siempre estaremos a vuestro lado, pero debéis pedírnoslo.

Así que preparaos ahora y no os perdáis. El final está más cerca de lo que pensáis, ¡y la Nueva Jerusalén está preparada!

Venid, hijos Míos, venid, el Padre es puro amor. De este amor Él os da la paz de los 1000 años, y este tiempo ya está cerca. Amén.

Venid, hijos Míos, venid. El Padre os espera. Amén.

Con amor y bendición celestial, nos despedimos hoy de vosotros.

Creed y confiad, hijos Míos, porque no os queda mucho tiempo . Amén.

Vuestra Madre del Cielo, los Santos Ángeles del Padre, los Santos de la Comunión de los Santos, así como Dios Padre y Jesús y el Espíritu Santo. Amén.

« Nuestro amor por ti es infinito, acéptalo . Amén».

« La oración es importante. Utilízala . Amén».