[EL NIÑO JESÚS] Immi,(1) debemos advertir a las personas, debemos alertarlas. Diles, oh Immi, que no pierdan las raíces del Cielo! En estas raíces fluye la miel de sus vidas, que es Nuestra Presencia para ellos en los tiempos venideros, que serán dolorosos y apocalípticos, porque el hombre se ha puesto el círculo de la razón, que es irrazonable, y el hombre se perderá.
Immi, habla a los hombres, diles que entren en Mi Voluntad, que es Luz, y caminarán por los caminos de la Luz y no por los caminos del polvo y las arenas movedizas. Caminarán rectos hacia adelante, guiados por el Espíritu.
Immi, desde Mi Cielo de Gloria, me trajiste al mundo para que el mundo fuera iluminado e iluminado. Hoy, el mundo vive en terror porque ha cortado sus lazos con el Cielo. Oh, Immi, ve a su ayuda, dile que se arrepienta y regrese a Nuestros dos Corazones unidos, entonces recuperará confianza y una sonrisa en su corazón, caminará recto en Nuestras huellas y no se perderá.
Immi, el Apocalipsis venidero no será para dividir sino para unir al hombre con las autoridades del Cielo. Mi Padre viene a buscar a los suyos y desea salvar al mayor número posible.
Immi, tráeles la dulzura de Tu Corazón, que encuentren paz en el suyo y sigan Nuestras huellas!
(1) Mamá.
Fuente: ➥ MessagesDuCielAChristine.fr