miércoles, 10 de septiembre de 2025

¡No lo dudes, confía en mí y cuéntame todo sobre vosotros!

Mensaje de la Santísima Virgen y Nuestro Señor Jesucristo a Myriam Corsini en Carbonia, Cerdeña (Italia) el 7 de septiembre de 2025.

Queridos hijos, María Inmaculada, Madre de todos los Pueblos, Madre de Dios, Madre de la Iglesia, Reina de Ángeles, Ayuda de Pecadores y Misericordiosa Madre de todos los hijos de la tierra, mirad, hijos, Ella viene a vosotros esta tarde para amaros y bendeciros.

Todos los pueblos, no temáis cuando digo “¡BUSCÁOS EL UNO AL OTRO!”. No tengáis miedo.

Ved, si buscáis un hermano o una hermana, ellos no os dirán que no, porque Dios ya les ha predispuesto a amar. Cuando os digo que trabajéis por la unidad, lo veis como algo tan grande como una montaña, pero no, hijos míos, no es así. Solo la palabra “unidad” debería haceros sentir cerca del Corazón de Dios.

Dios creó la tierra y luego a sus hijos, y les ofreció este paraíso para que toda la familia permaneciera unida. ¡No temáis! Cuando os sintáis oprimidos, buscad a Jesús. No tengáis miedo de que os diga “YA OS LO DIJE!”. Él no hará eso, pero buscadle, porque es en esos momentos cuando os abriréis a la unión.

Ved, hijos míos, muchos de vosotros aspiráis a la unidad, ¡pero muchos tenéis miedo! Si comenzáis el trabajo por la unidad, tendréis a Jesús como vuestro ingeniero, así que no debéis tener miedo. Id y dejad que os guíen. Dios puede hacer todo y siempre pone las cosas correctas en su lugar.

No os angustiéis, hacedlo, quitad el peso de vuestros corazones, y al hacerlo volveréis a entrar en la gran familia y pensad, hijos míos, en la alegría y exaltación de Dios Padre Celestial. Ya puedo verlo levantarse de su trono y gritar: “MARÍA, MUJER, HA SUCEDIDO!”.

¿Seréis capaces alguna vez de dar esta inmensa felicidad a vuestro Padre?

Digo sí porque sois sus hijos y os conozco y LE CONOZCO!

ALABANZA AL PADRE, AL HIJO Y AL ESPÍRITU SANTO.

Os doy Mi Santa Bendición y os agradezco que me escuchéis.

¡ORAD, ORAD, ORAD!

JESÚS APARECIÓ Y DIJO.

Hermana, es Jesús quien te habla: “TE BENDIGO EN MI NOMBRE TRINO, QUE ES EL PADRE, YO EL HIJO Y EL ESPÍRITU SANTO! AMÉN”.

Que descienda abundantemente, luminosamente, santificando y temblorosamente sobre todos los pueblos de la tierra, para que entiendan no ser tímidos y avancen a buscarme.

Hijos míos, es vuestro Señor Jesucristo quien os habla!

Sí, ¡siempre soy Yo! Acercadse, no pretendo querer ser buscado, no penséis eso, os lo he dicho para estar en plena confianza. Venid, venid, os tomaré de la mano y haré que entendáis que cuando sintáis opresión debéis venir a mí y no dudarlo.

Si venís a Mí, yo os purificaré y continuaréis vuestro camino, y allí gustaréis la dulzura del camino hacia la santidad sin opresión. Sois como Dios os hizo.

¡No lo dudes, confía en mí y cuéntame todo sobre vosotros! Si hacéis esto, entonces estaréis en un buen punto para la unión. Ahora todo os parece difícil, tal como dijo la Santa Madre, pero tened cuidado, no es así. Cuando hayáis hecho la unidad, seréis alegres y vuestros rostros expresarán la alegría que yo constantemente os doy.

¡No temáis, permaneced bajo Mi inmensa misericordia que cubre toda la tierra, nadie excluido!

TE BENDIGO EN MI NOMBRE TRINO, QUE ES EL PADRE, YO EL HIJO Y EL ESPÍRITU SANTO! AMÉN.

LA MADONNA VESTÍA TODO DE COLOR PERVINCA, LLEVABA UNA CORONA DE DOCE ESTRELLAS SOBRE SU CABEZA, SOSTENÍA UNA ANTORCHA EN SU MANO DERECHA Y HABÍA HUMO NEGRO BAJO SUS PIES.

JESÚS APARECIÓ CON EL ATUENDO DEL JESÚS MISERICORDIOSO. APENAS SE MANIFESTÓ, NOS HIZO REZAR EL PADRE NUESTRO. LLEVABA UNA TIARA EN LA CABEZA, SOSTENÍA UN VINCASTRO EN SU MANO DERECHA Y HABÍA UN JARDÍN DE FRESIAS AMARILLAS BAJO SUS PIES.

HABÍAN ÁNGELES, ARCÁNGELES Y SANTOS PRESENTES.

Fuente: ➥ www.MadonnaDellaRoccia.com